A mis abuelos.

A mis abuelos.

Siempre he sido una chica a la que le cuesta expresar sus sentimientos, pero existen momentos que son especiales y salen por sí solos.

Cuando era pequeña mientras mis padres trabajaban siempre había dos personas dispuestas a todo por mí, por su nieta, mis abuelos, mis segundos padres, gran parte de mí se la debo a ellos y se la sigo debiendo ya que pasan los años y me siguen enseñando día a día. Desde chica he visto el amor como algo que se siente, algo que se demuestra, algo que te estremece y te refugia. Nunca he sido una chica para explicarme bien, tal vez porque nunca he tenido que explicar lo que es para mí el amor, porque lo he visto a través de las personas que siempre nos guían.

Recuerdo cómo mis abuelos desde pequeña me han enseñado que en la vida siempre quedará algo por aprender, recuerdo los besos que mis abuelos siempre me daban cuando iban a tardar en verme unos días y sus brazos abiertos esperándome, recuerdo las tardes de brasero y las tostadas de nocilla. Recuerdo las risas, las cosquillas y como me secaban las lágrimas cuando lloraba. Recuerdo los primeros pasos que di en bici, los dejaba atrás y ellos sonriendo me miraban porque sabían que me hacía mayor. Pero lo que más recuero es que no me han dejado en ningún momento, mis logros han sido en gran parte suyos, mis penas, ellos las han combatido, su amor no se puede explicar y ahora que son mayores me siguen dando todo su amor y su cariño, espero corresponderles como ellos lo han hecho conmigo.

Gracias abuelos, os quiero.